Buenas tardes estimados lectores,
les escribo esta tarde soleada (en Temuco al menos) de día lunes, en la que
debería estar estudiando para dos exámenes que tengo mañana martes, pero la
motivación no llega a mí, por lo que decidí escribir.
Ayer mientras estaba estudiando
(ayer si tenía motivación y concentración), me metí a Facebook a hacer hora,
perder tiempo, etc., y salían hartas cosas de la famosa PSU y me acordé de mi
experiencia con ello.
Hace muchos años cuando yo era
una pequeña ilusa por la vida, tenía en mi mente estudiar derecho, me encantaba
esto de defender a los indefensos y así hacer un mundo mejor (la huéa ilusa),
en fin, pasaron los años hasta que llegué a tercero medio y en un ramo de
filosofía nos pasaron “Psicología”, y me enamoré. Descubrí el amor de mi vida
en el liceo a través de una profesora simpatiquísima, que me enseñó lo
necesario para escoger mi futuro. Así estuve un tiempo en una disonancia
cognitiva entre lo que pensaba hacer y lo que hacía, porque mis padres en ese momento
estaban fascinados con la idea de que yo fuera abogada y trabajara en juicios y
todo el tema que conlleva y les decía “sii” (con una emoción y una cara de
mierda que no sé cómo no se dieron cuenta), pero quién más entusiasmado estaba
era mi papá, porque su sueño frustrado en ese minuto era ser abogado, por lo
que la hija mayor debía cumplirlo. Pasó un año y ya se acercaba la pruebita
esa, y días antes estaba estresada pensando entre qué estudiar y la pinche
prueba de matemáticas (me carga matemáticas). Hasta que un día me levanté y
pensé “no ph hueón, es mí futuro, es lo que yo quiera hacer” y así fue como
agarré valor para decirle a mi familia que tendrían una psicóloga en la
familia. En un inicio no estaban muy contentos con la idea pero luego se adaptaron
y me apoyaron, total no les quedaba de otra, no me podía pasar la vida entera
haciendo algo que no me gusta, que probablemente no ejercería y moriría
pensando en que lo mejor hubiera sido estudiar otra cosa que si me agrade.
Finalmente, fui a dar la PSU
totalmente tranquila porque no necesitaba puntaje para entrar a la carrera y no
lo digo como alivio sino que me di el tiempo de revisar cada malla, de cada
universidad de Temuco y la escogida fue la Universidad Autónoma de Chile,
porque la malla estaba más dedicada a lo social y era completa dentro de lo que
yo quería ejercer, a diferencia de otras que tenían mucho de neurociencias y
estadísticas que en realidad no me servirían de mucho porque no me dedicaría a
la investigación y, otras universidades que se iban a paro y saldría el año
2500 de la universidad.
Así fue como comencé a estudiar
Psicología, y comencé a construir mi realidad a partir de mis decisiones haciéndome participe de mí vida. Creo que fue
la primera decisión importante que tomé (tomando en cuenta que yo era un
pajarito que podían hacer y deshacer y manejar como quisieran, no así ahora, al
menos eso creo).
A lo quería llegar con todo esto,
era que luchen por lo que ustedes quieran, no se dejen llevar por opiniones
hueonas (a pesar de que sean de su familia), que les impida ser felices y
autorrealizarse. Si alguno de ustedes estimados lectores está dando la
pruebita, les deseo mucho éxito y decirles que esta cagá de prueba no es un
impedimento para realizar sus sueños, es una huéa trámite que no hace más que
cagarnos la psiquis, llevando a los estudiantes a un estrés
mucho mayor del que deberían estar expuestos (considerando que están escogiendo
algo para su futuro y bla bla) y además, le dan color a la huéa de prueba.
Sigan su instinto, su pasión y lo que los mueve, fallen, levántense y vuelvan a intentar, que de eso se trata la vida.
Y a los que están en periodo de exámenes, final de semestre y cosas por el estilo, ánimo que ya les queda menos y podrán descansar. Gracias!