Todo parece ser inútil y ya no hay nada que te haga cambiar de parecer. Sientes que intentaste absolutamente todo y ya no tienes más ideas, ni mucho menos ganas de pensar en alguna.
Todas tus acciones erróneas y las posteriores decisiones equivocadas, acabaron por formar una gran ola que cae sobre ti, aplastándote y recordándote cada una de las situaciones que pasaron para llegar hasta donde te encuentras ahora.
El recuerdo de tu pésimo actuar hace que te culpes a ti mismo. Toda esa intranquilidad de saber que lo que hiciste estuvo mal acaba por convertirse en una marea de remordimiento que te atrapa y te impide salir de ella.
La desesperación comienza a apoderarse de ti y las dudas hacia ti mismo no se hacen esperar. Simplemente no estás siendo la persona que deseabas ser.
El arrepentimiento golpea fuerte dentro de ti, tal y como las ondas rebosantes de ira chocan entre sí en altamar. La corriente furiosa te arrastra a sectores cada vez más peligrosos.
Estás en el límite de la seguridad. Cruzando esta línea, todo se
vuelve más peligroso, al punto de poner tu vida en juego. Tienes que
salir ahora mismo.
Un paso más en falso y llegarás a un
punto de no retorno, en donde te encontrarás solo hundido en lo más
profundo del Mar de las Frustraciones.
¿Cómo escapar del Mar del Remordimiento?
La única opción para escapar del Mar del Remordimiento es mentalizarte, meditar y poner tu mente en blanco, buscando una solución a toda tu desdicha.
Probablemente llegarás a la conclusión de que no hay otro camino que partir de 0.
Sé lo difícil que es el dejar de lado toda esa angustia, esa frustración, ese odio y remordimiento que te consume por dentro. Sin embargo, tienes que hacerlo. Ahora es el momento.
Levántate, grita y ahuyenta todos tus problemas. Libera toda esa energía negativa al ambiente y que se pierda en la inmensidad del universo.
Recuerda que todo lo que te ocurre es experiencia para el futuro. Sea bueno o malo. Ambas opciones te dejan una enseñanza que -espero- el tiempo no borrará. Aprovecha todo lo que te ha ocurrido y utiliza ese aprendizaje para no volver a caer en las mismas trampas que te impone la vida.
Si te caes, levántate. Todo tiene solución.
Muchas gracias por leer!
Qué tengas una buena noche!
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