miércoles, 29 de marzo de 2017

#PuntoNorte - Capítulo 5: La luz en la oscuridad

Han pasado mil años desde la última vez que escribí, y bueno la verdad es que no tenía nada interesante que contar, mis vacaciones fueron fomes y rutinarias, consistía básicamente en levantarme, hacer aseo, cocinar (aprendí a cocinar csm) y ver novelas (Amanda, El secreto de Ferihá y a veces Ámbar) o sino salía con mi actual pololo, Bastian. Estaba ansiosa de comenzar las clases era lo único que quería, no solo por ver a mis amigas todos los días, sino que en mi cuarto año de Psicología, se venían ramos realmente interesantes, sobre todo para mí y el área en la que me quiero desarrollar. “Intervención en organizaciones” y “Psicología Juridica”, tengo grandes expectativas respecto a estos ramos, espero que durante el desarrollo de las asignaturas pueda cumplirlas.

 Anyway, lo que me convoca a este capítulo es la oscuridad, no física, sino que la oscuridad metafórica y momentánea en alguna etapa de la vida. Desde chica siempre he sido bien hueona, muy hueona, lo que me ha llevado muchas veces a sumergirme en una oscuridad de la que me ha costado salir, perdiendo mi norte. Pero me gusta ser así (buena gente = hueona), aunque muchas veces la gente se aprovecha, tanto así que me he relacionado con personas realmente tóxicas y que consumían mi energía, y lo demostraba deprimiéndome o demostrando enojo diariamente,  y no encontraba el modo de salir de ahí, sin embargo, siempre hay alguien o algo que te ayuda, alguien que te motiva a ser mejor y que aunque toques fondo está ahí, esperando para elevarte, sostenerte y ayudarte.

Muchas veces me ha tocado ser quien ayuda a los demás, la mayoría de las veces. Siento que en esta pinche sociedad no hay empatía, nadie se pone en el lugar del otro para lograr comprender como se siente realmente estar en los zapatos de otra persona, y no lo digo porque esté estudiando Psicología y tenga que ser la persona más empática que existe, sino que me he dado cuenta desde mucho antes que estamos insertos en una sociedad tan individualista que no nos damos cuenta como está el prójimo (pta que suena religiosa esa hueá). Que muchas veces caemos en el sucio juego de molestar a otros, sin saber lo que  está pasando por su mente,  o ser egoístas o irrespetuosos, pta no sé, que te cuesta dar una sonrisa al chofer penca de la micro, saludar amablemente a la vieja pesá de las fotocopias (logré que fuera un poco más  simpática, por lo menos conmigo), saludar a los tios que hacen el aseo en la U (son terrible wena onda loco!), pequeños gestos que pueden cambiar el día de una persona (por más cliché que suene), creo realmente que si nos esforzáramos un poco más por ser empáticos, podríamos ser una pequeña luz en la oscuridad de una persona, sea conocida o no.

Les dejo una frase de una de mis películas favoritas jiji:


“La felicidad puede estar incluso en un oscuro momento, sólo no olviden encender la luz” – Albus Dumbledore 

    (Recuperado de :https://twitter.com/lectorenllamas/status/644166812146470912)


Sí, Harry Potter jeje.

Piensen un poco respecto a cualquier etapa de su vida, sea buena o mala, ¿Encontraron alguna luz?

Buenas Noches! Muchas gracias por leer.

No hay comentarios:

Publicar un comentario