viernes, 22 de julio de 2016

#MarDeFrustraciones - Capítulo 29: Contrarrestando el odio con estilo

Una de las cosas que más me entretiene realizar como humano, es hacer caso omiso al odio que puedan demostrar sobre mí las otras personas. Eso de hacerles entender que nada de lo que digan con ese sentimiento de odio me afectará. Es algo magnífico el que, con un pequeño gesto, su odio pueda aumentar al punto de que ya no saben que más hacer para captar mi atención, sintiéndose como unos verdaderos idiotas que se ven consumidos por su propio odio. Genial.



Exacto, así es como se ven desde cualquier punto de vista diferente al suyo.

Si hay algo dentro de este tema que debo agradecer, es el ser una persona totalmente incompatible con respecto al odio, al punto que en mi vida he odiado a solo una persona. Y no, no es ese profesor mediocre que tuve el segundo semestre del año pasado; ese tipo sólo me desagrada. Por ahora no vale la pena nombrar a esa persona, pero te aseguro que en algunos meses lo explicaré de mejor manera. Lo que importa en este momento para lo que quiero decir, es que no importa cuánto intente irritarme una persona, pues es prácticamente imposible que sea capaz de ganarse mi odio.

Lo anterior no quita que tenga mis reacciones violentas cuando alguien hace daño a alguna persona cercana a mí. Pero dime ¿quién no reaccionaría a la defensiva cuando ves que uno de los tuyos se ve afectado a causa de algún tarado por ahí?

Soy una persona que "odia el odio". Suena extraño, pero creo que me define bien. El odio es una de las sensaciones más desagradables que se pueden llegar a sentir, sin importar si es producida por enojo, envidia, impotencia o simple desagrado; la razón aquí simplemente no importa. Es por eso disfruto el experimentar formas de lidiar contra el odio de aquellas personas aunque, por lástima, siempre tiendo a incrementarlo.

Como ejemplo de lo anterior, podría poner una situación que es algo recurrente últimamente: "Compañeros" que hablan mal de ti sabiendo que estás escuchando. Yo no sé qué será lo que buscan al hacer eso; pero bueno, lo que digan me entra por un oído y... ¡Exacto! Me sale por el otro. ¿Para qué amargarse por algo tan sin sentido, más aún cuando son personas que en su vida serán capaces de decirte algo a la cara? Lo mejor de todo esto es lo posterior, pues sigo saludándolos como siempre, notándose a leguas el rencor sin sentido que tienen hacia mí.

Otro ejemplo es cuando estás en medio de una discusión con una persona que irradia energía negativa ¿Cómo reaccionar ante eso? Bueno, habrás notado lo que pasa cuando pierdes una discusión; eso de que al pasar unos minutos, horas, o quizá en la noche, te das cuenta de lo idiota que fuiste, pues resulta que se te acaba de ocurrir una brillante idea que pudiste haber utilizado como respuesta durante la discusión. Como siempre, nuestro querido cerebro haciendo de las suyas. A lo que quiero llegar es que, cuando te encuentres trabado con una respuesta, te tomes unos 10 o 15 segundos para pensar y meditar la mejor respuesta, la definitiva. Así pasarás de esto:

+ Insisto, deberías dejar de quejarte por todo.
- Me gusta la mantequilla.

A esto:

+Insisto, deberías dejar de quejarte por todo.
- ...
+ ¿?
- Y tú deberías dejar de quejarte de que los demás expongan sus quejas.

Con eso será más que suficiente. Procura añadir en la licuadora un litro de genialidad, una taza de humor, unas cucharaditas de ironía y una pizca de picardía. Ingredientes idóneos para, cual exorcismo, sacar el demonio acumulador de odio de tu objetivo. Luego de eso, despreocúpate; sólo te limitaste a responder con estilo lo que tu contendiente pensaba que sería la estocada final para acabar con tu participación en la discusión. Defensa personal, dicen.

Otra arma letal es la indiferencia. ¿Qué mejor que, literalmente, "hacerse el hueón" cuando alguien te está hablando en la mala onda? Imagina la situación: Una persona que te detesta te "encara" y te comienza a decir un sinfín de idioteces que a ti no te van ni te vienen; tú, por tu parte, sigues tu camino dejando a aquella persona hablando con el viento. Un auténtico néctar de la vida.

Si eres de las personas que se bloquean durante una discusión y siempre terminan perdiendo, sigue estos consejos. Te garantizo que se servirán y que, por sobre todo, te sacarán más de alguna carcajada. El arte de contrarrestar el odio con estilo.

Si odias a alguien, pregúntate: ¿Por qué odio a esa persona? ¿En qué me beneficia odiarla? ¿Me hace sentir mejor? Con eso será más que suficiente.



¡Muchas gracias por leer!
¡Qué tengas una buena noche!

Recuerda darle un like a la página de facebook y dejar tu comentario en el Chat, al costado derecho del blog.



No hay comentarios:

Publicar un comentario