Cuando eres pequeño, todo parece ser tan fácil, que nunca se te pasa por la cabeza lo jodida que puede llegar a ser la vida. Sin embargo, pasa el tiempo y con los años te vas dando cuenta que nada es como pensabas de niño. Te enfrentas a todo un mundo de situaciones, de las cuales muchas son problemáticas y de alta complejidad, en donde difícilmente podrás salir airoso estando solo. Necesitas del apoyo de los demás.
No creo que haya persona en el mundo que haya podido salir adelante, pelear y llevar a cabo cada una de sus metas y sus sueños sin el apoyo de al menos una persona.
Es algo que resulta fundamental. Siempre se necesita una palabra, una palmada en la espalda o un abrazo que te impulse a realizar lo que deseas (o sacarte del camino equivocado que podrías estar tomando). Se necesita ese "empujoncito" para impulsarte hacia tus metas. Si intentas hacerlo solo, el mundo y todo el ambiente que te rodea acabarán por consumir la totalidad de tus energías, hasta el punto en que llegarás a pensar que simplemente no puedes hacerlo. Necesitarás de esa (o esas) personas que te manifiesten sus buenas intenciones y te ayuden en tu camino hacia tus sueños.
Estando solo no llegarás a nada. Quizá y teniendo suerte puedas realizar tus deseos, sin embargo, quedará sólo en eso. No tendrás con quien compartir tu gran logro y será lo mismo que no haber conseguido nada. ¿Me entiendes?
Necesitas dejar de lado ese orgullo que te grita hasta convencerte de que no necesitas la ayuda de nadie y que puedes hacer todo por tu cuenta. Necesitas ese apoyo que se haga camino hasta taparle la boca con millones de capas de cinta adhesiva al tan detestable y repudiable orgullo. Está bien que seas orgulloso con algunas cosas, pero este no es el caso.
Si todo este texto te ha golpeado de alguna manera (espero que no), quiere decir que eres el tipo de persona que deberías evitar. No es para nada recomendable seguir el camino del orgullo que te llevará a un mundo de tinieblas en que no podrás verte ni a ti mismo. Te hundirás solo en la oscuridad de tus ambiciones personales.
Es importante tener personas con quienes compartir (y por compartir no me refiero al concepto que utiliza gran parte de la sociedad, haciendo hincapié en juntarse con otras personas a fumar y a alcoholizarse hasta un extremo) una inmensidad de momentos, ya sean agradables o desagradables. La sumatoria de todos esas experiencias te volverá alguien capaz de diferenciar el apoyo de la debilidad. De lo contrario, seguirás pensando que el apoyo es algo que necesitan los débiles, y el orgullo hará que sientas que eres una persona autosuficiente, que puede realizar lo que quiera sin importar nada.
El apoyo es algo fundamental en todo aspecto de la vida. Como en el deporte: Si erras, sabes que tus compañeros te respaldarán y te ayudarán a salir adelante. Seguirán pasándote el balón, confiando en que para la próxima ocasión, anotarás. El apoyo te ayuda a seguir adelante incluso antes de que puedas pensar "esto es imposible", "no puedo hacerlo". Esos pensamientos no tienen cabida en un mundo en que todos nos apoyemos mutuamente, dejando de lado el orgullo y los ideales estúpidos que defendemos y que sólo acaban por separarnos como seres humanos.
Mira a tu alrededor y piensa quién podría necesitar tu apoyo. Es muy fácil hacer algo por los demás. Mucho más fácil que girar tu cabeza en sentido opuesto y ver lo bien que te encuentras.
Me encantaría cambiar el mundo...
Muchas gracias por leer!
Qué tengas una buena noche!
Recuerda darle un like a la página de facebook y dejar tu comentario en el Chat, al costado derecho del blog.
No hay comentarios:
Publicar un comentario